1- Abu Huraira relató haber
oído al Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con
él), decir: “Decidme, si hubiera un manantial al lado de vuestra puerta,
en el que os bañarais cinco veces al día, ¿permanecería algo de suciedad
en su cuerpo?” Dijeron: “No quedaría rastro de suciedad.” Contestó: “Este
es el efecto de las cinco oraciones, mediante las cuales Al-lah borra
todos nuestros pecados”. (Bujari)
2- Ibn Umar dijo: “El Profeta,
(la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él), dijo: “Observad parte de
vuestras oraciones en vuestros hogares y no los convirtáis en tumbas.” (Bujari)
3- Abu Qatada dijo: “El
Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él),
dijo: “El peor ladrón es el que roba su oración.” Le preguntaron:
“¡Mensajero de Al-lah! ¿Cómo roba su oración?”. Respondió: “Cuando no
completa la inclinación ni la postración”. (Ahmad)
4- Abu Huraira dijo: “El
Mensajero de Al-lah, (la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él),
dijo: “Ninguna plegaria supone carga mayor para los hipócritas que las
oraciones de Fállar (mañana) e Isha (noche). Si supieran el bien que les
aguarda por ofrecerlas, las hubieran ofrecido aunque hubieran tenido que
arrastrar su cuerpo para ello”. (Bujari). |